Breaking

¡Ya estoy en youtube! Si gusta puedes apoyarme con una SUSCRIPCIÓN, es gratis y toma pocos segundos. Saludos.

La Gerencia en el Aula de Clases.





Por Freddy Rivas Vielma

La Gerencia en el Aula de Clases

La Gerencia

La gerencia hoy en día es concebida como una actividad fundamental en toda institución escolar como en toda actividad donde el ser humano participe, y exista más de una persona, se necesita que alguien planifique, coordine o dirija a ese grupo con el fin de que todo esfuerzo mancomunado y toda esa energía tenga un sentido para que se cumplan los objetivos propuestos y se logren alcanzar unos fines y unas metas.

Durante mucho tiempo se entendía que la gestión de un director de plantel como la de un docente de aula se realizaba por solo empirismo, pidiendo consejo a otros docentes o a supervisores. Hoy día, la gerencia no es entendida de esa forma. Es un proceso complejo que abarca más allá del perímetro de los planteles. Hay que vincularla con la comunidad donde se circunscribe la institución, con sus fuerzas representativas, historia e idiosincrasia y con el medio ambiente que le rodea. Esto puede que genere un entorno agradable o no  que surjan amenazas u oportunidades. Es aquí, donde el Director de la institución y el docente de aula deben actuar con todos sus conocimientos y experiencias para transformar desde su ámbito de trabajo a la escuela y a su comunidad.


De lo anteriormente expuesto, es necesario conocer lo que es la gerencia. Al respecto Ruiz (1992, p.27) señala que la gerencia “se refiere a las organizaciones que efectúan actividades de planificación, organización, dirección y control a objeto de utilizar sus recursos humanos, físicos y financieros con la finalidad de alcanzar objetivos comúnmente relacionados con beneficios económicos”. En el caso de la educación, la gerencia tiene un carácter social, puesto que se desarrollan personas.

Al respecto, González, Zabala y Fernández (2004) señalan que en la “gerencia educativa el concepto de eficiencia es donde subyace el logro de los objetivos con la menor inversión y esperando que el producto: los estudiantes, representen un elemento óptimo al ingresar al aparato productivo de la sociedad”. De aquí se deduce que el verdadero gerente educativo es aquel que teniendo poco, en cuanto a recursos, logra conseguir las metas que se ha propuesto.

Es importante señalar que la necesidad de la gerencia surge, como lo señala Villasmil (2006):
Cuando algunos individuos forman un grupo...tienen un objetivo, se hace necesario, para el grupo, trabajar unidos a fin de lograr dicho objetivo. Los integrantes del grupo deben subordinar, hasta cierto punto, sus deseos individuales para alcanzar las metas del grupo, y la gerencia debe proveer liderato, dirección y coordinación de esfuerzos para la acción del grupo (p.80).

En este orden de ideas, la gerencia aplicada a la instrucción y por ser llevada por los dos actores fundamentales: docentes y estudiantes, generalmente en un espacio muy particular, corresponde a una muy específica, denominada gerencia de aula, que Ruiz (1992, p.11) la señala como “un proceso de planificación, organización, dirección y control de las actividades de aprendizaje implícitos en un diseño curricular”. También Pernalete (2005, p.11) señala que “el docente como gerente de aula desarrolla una serie de aspectos, entre los más específicos se puede mencionar los que están relacionados con la administración del proceso de enseñanza y aprendizaje, que debe poner en práctica.”

De acuerdo a lo anteriormente planteado, se infiere que el docente se hace gerente en el espacio donde se desenvuelve en su quehacer diario: el aula de clases. Es aquí donde, obviamente, se generan las experiencias de interacción de los estudiantes para lograr la construcción de los procesos de aprendizaje. De ahí que, el docente en el aula se convierte en un efectivo gerente en aspectos como: administrar el tiempo, elegir y aplicar métodos y técnicas, manejo de recursos, toma de decisiones, comunicación individual y grupal, planificación y evaluación. Él debe amalgamar todas estas situaciones para enfocarlas en función de formar a los estudiantes mediante una educación de calidad.

Aunado a lo anteriormente expuesto, el aula se convierte en un espacio para la interacción, comunicación y conocimiento entre docente y los estudiantes en función de objetivos comunes. Así, el gerente de aula debe actuar en función de permitir un contexto organizacional adecuado, agradable y armonioso, para que se logre generar el acto de aprendizaje. Es decir, para lograr esa convivencia el docente debe cumplir roles como: facilitador, orientador, mediador de experiencias, líder para la toma de decisiones efectivas e incentivador de acciones positivas. De este modo el docente, como gerente de aula, debe superar las prácticas tradicionales en su quehacer pedagógico, donde la enseñanza se ha convertido en un procedimiento mecánico y tedioso. 

Así mismo, la gerencia de aula no sólo puede interpretarse como la conjunción de cuatro procesos, sino que también influye el docente como el actor principal el cual debe actuar en forma integral. Al respecto Rojas (2003) manifiesta que:
El docente tiene un rol primordial como gerente de aula, ser el responsable directo de la gestión en el aula. Esto implica tener las habilidades, para interaccionar con los alumnos, conocer y saber aplicar métodos y estrategias en los procesos de enseñanza, conocer las características de los alumnos, trabajar en equipos e interactuar con los padres y representantes y con la comunidad.”

También es de destacar, que la educación venezolana exige urgentemente que los docentes cambien de paradigma en relación a lo que se debe enseñar y lo que se debe aprender con respecto a otra forma de dirigir su acción a través de actividades con los estudiantes, en los que necesariamente exista interacción estudiante-estudiante, estudiante-docente, estudiante-contenido. En este particular, Méndez (2004 p.6) señala que “se necesita de docentes que asuman el rol de estrategas, que vayan creando situaciones de aprendizaje significativo, donde guíen el proceso de construcción de aprendizaje.”

De acuerdo a lo expresado por el autor, necesariamente, el docente debe asumir un rol de docente Facilitador-Mediador. Al respecto el Ministerio de Educación (1997) a través del Currículo Básico Nacional señala que el docente:
Será un facilitador al preparar ambientes de aprendizaje que presente retos para los alumnos asumiendo una actitud ética al tomarlo en cuenta como persona y que se esfuerza en su actuación; será mediador al intervenir en la introducción de información o al acompañarlos en la solución de conflictos o problemas que se les presenten al enfrentar retos, al seleccionar información y al motivar el intercambio. (p.65.)

De lo anteriormente expuesto, el docente como gerente de aula, debe planificar su acción pedagógica desde la perspectiva del docente facilitador-mediador. Por tanto, este docente tiene que reunir condiciones especiales. En este particular Marcano (2006) señala:
Un maestro es un ser que a través de sus experiencias inventa técnicas para conducir a una verdad que debe ser interpretada, enseñando nuevas formas de pensar, abriendo interrogantes a los alumnos, que deben tomar el sinónimo de discípulos. 

Él debe desenvolverse con encanto y estilo, logrando con ello, del aula de clase, un espacio agradable, mágico. Una clase compromete emoción por parte del docente, quien a través de su discurso podrá sensibilizar al alumno para que el mensaje pueda ser captado y descifrado. (s/p)

Es así que el docente como gerente y líder en aula, debe promover ambientes de aprendizaje, por ser él quien es responsable directo de la acción pedagógica. En este particular Méndez (2004) fortalece esta idea: 
El docente deberá promover ambientes de aprendizaje compartido, donde los estudiantes se expresen e interactúen con los compañeros. El docente mediador en el trabajo de grupo o aprendizaje cooperativo, permiten que los alumnos piensen en voz alta, así reconoce como aprenden y detecta dificultades; con la mediación docente se desarrolla aprendizajes cognitivos, sino también valores y actitudes, es decir desarrolla procesos afectivos. (p. 17).

En este sentido el docente, promueve la búsqueda e implantación de una escuela eficaz a través de una gerencia efectiva en la clase. Es así, que se considera que la gerencia de aula se enmarcaría en el paradigma participativo, o lo que es lo mismo, en hacer coparticipes a los estudiantes de su proceso de aprendizaje, donde exista una interrelación de igualdad y donde lo ideal sea la negociación enfocada desde la premisa ganar-ganar.

En este orden de ideas, al hablar de las funciones gerenciales es necesario señalar a la gerencia como una disciplina académica y considerarla como un proceso. Cuando la gerencia es vista como un proceso, puede ser analizada y descrita en términos de varias funciones fundamentales. Al discutir el proceso gerencial es conveniente, y aun necesario, describir y estudiar cada función del proceso separadamente. Como resultado, podría parecer que el proceso gerencial es una serie de funciones separadas, cada una de ellas encajadas ajustadamente en un comportamiento aparte. Esto no es así aunque el proceso, para que pueda ser bien entendido, deberá ser subdividido, y cada parte discutida separadamente. En la práctica, un gerente puede ejecutar simultáneamente, o al menos en forma continuada, todas o algunas de las siguientes cuatro funciones:


La Planificación


En general, toda actividad que realice el ser humano necesariamente tiene que ser planificada para lograr eficazmente los objetivos propuestos. En el caso a que se hace referencia, la gestión del docente en el aula, Ruiz (1992) señala que la planificación:
Constituye un proceso de primordial importancia para el gerente de la instrucción. Todos los actos que el docente practica para enseñar deben ser producto de actividades planificadas y atender al diseño curricular de la instrucción donde se desenvuelve.

Planificar la enseñanza es calcular lo que se hará en el futuro desenvolvimiento del proceso de aprendizaje, procurando dominar el curso de los acontecimientos que en forma natural ocurrirán. Planificar significa tomar decisiones respecto a las interrogantes que surjan al momento de analizar la situación en que se desarrollará la actividad docente. (p.65).

De acuerdo a lo anteriormente señalado por el autor, se infiere que el proceso de planificación llevado por el gerente de aula, implica determinar los objetivos y metas que aspira alcanzar durante el año escolar, tomando en cuenta los recursos humanos y materiales; todo esto indica que se deben planificar actividades en conjunto con los estudiantes, en lo que se refiere a las actividades de clase y la evaluación de las mismas. 

Es preciso señalar, que el docente tiene unas intenciones que definen una meta hacia la que pretende conducir al estudiante. Esto no quiere decir que el docente sabe a donde va a llegar el estudiante pero si tiene que tener muy claro a donde lo quiere llevar. 

La Organización


Stoner y Freeman (1994, p.9) señalan que la organización “es un proceso de disponer y destinar el trabajo, la autoridad y los recursos entre los miembros de una organización en una forma tal que puedan lograr los objetivos de la organización de manera eficiente.” Con lo anteriormente señalado, la organización como proceso gerencial administrativo en el ámbito educativo, representa no solo la posibilidad de ordenar y clasificar todos los elementos que el gerente de aula debe utilizar durante su gestión, sino también la manera de preparar y manejar información que contribuya al alcance de los objetivos, así como también al mantenimiento de un clima organizacional óptimo para un efectivo desenvolvimiento de las actividades a cumplirse.


La dirección



A diferencia de la planificación y la organización que se ocupan de los aspectos más abstractos del proceso administrativo, la dirección es una actividad muy concreta: Requiere trabajar directamente con las personas, en este caso con los estudiantes. Villasmil (2006), señala que esta función gerencial:

Envuelve los conceptos de motivación, liderato, guía, estimulo y actuación. A pesar de que cada uno de los términos tiene una connotación diferente, todos ellos indican claramente que esta función gerencial tiene que ver con los factores humanos de una organización. Es como resultados de los esfuerzos de cada miembro de una organización que ésta logra cumplir sus propósitos, de ahí que dirigir la organización de manera que alcancen sus objetivos en la forma más óptima posible, es una función fundamental del proceso gerencial. (p.81)

Así pues, el docente como gerente de aula, debe crear la atmósfera adecuada para contribuir a que los estudiantes den lo mejor de sí. Para ello, es necesario que el docente, como lo señala Marcano (2006, s/p) sea “un ser que a través de sus experiencias, inventa técnicas para conducir una verdad que debe ser interpretada, enseñando nuevas formas de pensar, abriendo interrogantes en los alumnos”.

El control


Esta fase de la gerencia es importante, ya que el docente como gerente de aula debe cerciorarse que las acciones de los estudiantes y del suyo propio, en el aula de clases, lleven a la obtención de las metas propuestas. Es así que Pernalete (2005, p.18) señala que “en esta fase se hacen mediciones y comparaciones con un patrón, que de lograrse, amerita una retroalimentación de los insumos, durante o al final del proceso”. Es aquí donde el desempeño docente debe poner de manifiesto su capacidad para actuar con certeza en la toma de decisiones, como una de las características que debe poseer para desempeñar eficientemente en sus funciones. 

También es importante señalar que la función de control es ejercida continuamente y aunque relacionada con las funciones de organización y dirección, está más íntimamente asociada con la función de planeamiento. La acción correctiva del control da lugar, a un replanteamiento de los planes, es por ello, que se consideran ambas funciones como parte de un ciclo continuo de planeamiento-control-planeamiento.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Escriba su comentario de tal manera que éste sea suficientemente claro. No utilice argumentos que incluyan ataques personales o comentarios relacionados con otra persona. Los comentarios contribuyen a una discusión justa. Trate a los otros usuarios de la misma manera que quisiera que lo trataran a usted. Los comentarios se referirán a la entrada del blog correspondiente o a comentarios previos. No se aceptarán comentarios difamatorios, racistas, ofensivos, inadecuados, desproporcionadamente largos y temáticamente irrelevantes, así como comentarios destinados principalmente a la transmisión de propaganda, publicidad o a la divulgación de ideologías.

El Administrador del Blog.
.